Lund es una pequeña ciudad que tiene, por lo menos, un ejemplar de todo lo que uno se pueda imaginar. Andando por sus calles nos podemos encontrar con una ganadora del premio Nobel, más de un escritor famoso o un ganador del festival de Eurovisión y, ni que decir tiene, medallistas olímpicos y artistas de moda. También tenemos un poeta oficial, bueno, semioficial, un bardo o trovador, que canta las excelencias de la ciudad en los salones mas coquetos de la metrópolis. A Niklas Törnlund, que así se llama nuestro poeta/cantautor, se le puede ver pasar en bicicleta con su guitarra a la espalda, camino de algún concierto o charla. Ahora que ya va alcanzando una edad respetable, le ha empezado a interesar la historia y se ha sumergido en los archivos y hemerotecas, buscando, como hacemos todos los historiadores, las raíces de esta sociedad en la que vivimos y la explicación de por qué somos como somos. En un foro de Facebook que lleva el nombre de “Tú sabes que eres de Lund…” (Du vet att du är från Lund…) escribió recientemente algo que descubrió leyendo la revista de los estudiantes “Lundagård” (es el nombre también del paraninfo universitario de Lund) sobre el carnaval de mayo del 1934.  El carnaval estudiantil es algo que ocurre cada cuatro años y que tiene una tradición que nos lleva a 1849, el próximo será 2026.

Se puede decir que el carnaval estudiantil trata de encontrar el nervio de los acontecimientos más importantes ocurridos en Lund, en Suecia y en el mundo mundial, en política, economía, ciencia etc.  siempre con un punto de humor, a veces muy negro, muy sui generis. Törnlund lee la revista y encuentra algo que le llama la atención. La parte del paraninfo, acotado para la ocasión ha sido rebautizado como “Campo de concentración” (Koncentrationsläger). Törnlund nos cuenta:

“A propósito del Carnaval de Lund en mayo de 1934, es decir, casi un año y medio después de la toma del poder por los nazis: El tema fue «El Día del Tercer Reich» y el comité del carnaval había comprado brazaletes con esvásticas auténticos de uno de los partidos nazis.

La revista Lundagård lo describe así: «Al frente del desfile del carnaval va un coche cuyos lados llevan pancartas con esvásticas pintadas. Los estudiantes a bordo van disfrazados como los hombres más importantes de la Alemania nazi. En la plataforma trasera, Hitler está tocando el piano mientras Goebbels y Göring saludan a las multitudes.»

Con un juego de palabras apenas disimulado, el mismo Lundagård fue rebautizado como el Parque de las Bestias y el lugar de la fiesta como… bueno, ya lo ven ustedes mismos. El periódico del carnaval se llamaba Vårkamp. (aludiendo a Mein Kampf, vår signifika primavera y nuestro)”

El 20 de marzo de 1933, Heinrich Himmler dio una conferencia de prensa y declaró que el primer campo de concentración, Dachau, había sido abierto. TT escribió sobre esto y el artículo fue publicado en varios periódicos suecos. Después de esto, siguieron numerosos informes sobre la tortura, los asesinatos y los abusos en los campos (los nazis querían que los campos fueran conocidos y disuadieran a los opositores). Además, al menos 6 suecos realizaron «visitas de estudio» a los campos antes de que se celebrara el Carnaval de Lund. Sus informes fueron publicados en Aftonbladet, DN, periódicos nazis, Östgöta Korren, el periódico de la Asociación Sueca de Paz y Arbitraje, Arbetet y numerosos periódicos de izquierda. Así que sí, todos los que sabían leer sabían lo que ocurría en los campos de concentración alemanes (si querían saberlo). Los campos de exterminio en Polonia no comenzaron a establecerse hasta diciembre de 1942 y lo que sucedía en ellos no se supo hasta el verano de 1943.

Ante las inminentes elecciones al Parlamento Europeo, estoy representando mi partido en el mismo centro de Lund, en la Plaza Mayor (Stortorget). Tenemos un container con un pequeño habitáculo y una tienda de campaña con nuestro logo. Ponemos una mesita con folletos y papeletas y contestamos a las preguntas que los ciudadanos y transeúntes nos quieran hacer. En principio, estamos todos los partidos representados. A mi derecha tengo al partido de izquierda (Vänsterpartiet), a la derecha de este está el partido verde (Miljöpartiet) y a la derecha de los verdes están los Demócratas Suecos Sverigedemokrater) que es lo más cerca que se puede estar del español Vox. A mi izquierda están los demócratas cristianos (Kristdemokraterna) con el partido del Centro (Centerpartiet) a su izquierda y los Socialdemócratas (Socialdemokraterna) a la izquierda de los del centro. Un partido nuevo y desconocido (Volt) pone un tenderete de vez en cuando, para marcar su presencia. Estos de Volt se hacen llamar liberales y quieren que Europa se convierta en una federación tipo Estados Unidos. Entre nosotros, los políticos participantes, nos llevamos bien. Nos ayudamos mutuamente a poner los tingladillos y, de vez en cuando, hablamos de cosas cotidianas, casi nunca de política, y si lo hacemos, nos gastamos bromas sin ánimo de ofender.

Ni que decir tiene, que todos los partidos tienen el permiso correspondiente de las autoridades competentes, que nos han designado un lugar en la plaza hasta el 9 de junio, fecha de las elecciones. Bueno, pues ayer, los estudiantes que siguen acampados en el paraninfo de la universidad, a doscientos metros de nuestro pequeño campamento, se formaron en procesión y cantando y chillando máximas como: “Fuera sionistas de nuestras calles”, “fuera fascistas de nuestras calles”, “muerte a Israel”, `boicotea Israel”, “Israel fuera de Palestina” etc. con altavoces a gran volumen, se pusieron a gritar a un metro de la carpa de Sverigedemokraterna, sin que estos pestañearan. Nosotros, que estamos a veinte metros del partido que se parece a Vox, quedamos aturdidos por los gritos. En medio de este caos, sin que apareciese la policía por ningún lado, me pregunta un transeúnte que qué pienso de la demonstración y yo le respondí de esta manera:

Por mí, todos tenemos derecho a expresar nuestras preferencias políticas. Yo lo hago con mi vestimenta, estando en esta carpa, repartiendo información de nuestro partido y hablando con todo aquel que quiera saber más de alguna cuestión política y de nuestra política en general. Hemos solicitado permiso y no violamos ninguna ley. Esta gente (refiriéndome a los gritones) vienen aquí con sus chales de Palestina y sus banderas a gritarle a un partido en concreto, tildándoles de fascistas y sin dar lugar a diálogo o discusión. La cuestión Palestina es muy complicada, gritaba yo para hacerme oír entre los pitidos y los gritos, y no se debería polarizar de esta manera. El transeúnte anónimo asintió con la cabeza y se marchó, mostrando con gestos su rechazo a los alborotadores.  

Horas antes, una jovencita se acerco a nuestra carpa y me preguntó a bocajarro cual era mi opinión sobre el conflicto. Empecé, como de costumbre, explicando la complejidad del conflicto y la larga historia de agravios mutuos, que se escondía tras él. Sin dejarme hablar hasta el final de mi pequeño discurso, parándome en seco me espetó: “! Israel tiene que desaparecer!”, “! ¡Que se vayan a Estados Unidos y dejen Palestina para los Palestinos!”. Le dije que uno de los problemas era que Hamas había tomado rehenes, que no quería soltar. A esto ella me contestó que Israel también tenía rehenes, los presos palestinos en las cárceles israelíes.  Cuando recobré la palabra, ella dijo muchas más cosas, que prefiero no difundir, tomé carrerilla y le dije lo que sigue:

El 7 de octubre de 2023, Hamas lanzó un ataque masivo contra Israel, incluyendo el lanzamiento de miles de cohetes y ataques terrestres que resultaron en numerosas muertes y secuestros de civiles israelíes. Esto lo has tenido que leer tú en algún medio de comunicación, porque es bien conocido. Este acto de agresión es una clara violación del derecho internacional y un desencadenante directo, un pistoletazo de salida, hacia la escalada del conflicto.

El conflicto entre israelíes y palestinos tiene una larga historia de violencia que se remonta a más de un siglo, por no irme más lejos. Ambas partes han cometido actos que han perpetuado la animosidad y la desconfianza mutuas. No es la primera vez que un conflicto armado estalla entre los dos pueblos bíblicos. Para ajustarnos a la más reciente actualidad, la Franja de Gaza, controlada por Hamas, enfrenta un bloqueo israelí que ha sido criticado internacionalmente por causar una crisis humanitaria. Ahí sí te doy la razón, que la comunidad internacional ha sido demasiado pasiva. Sin embargo, Israel justifica el bloqueo como una medida de seguridad para prevenir ataques terroristas, y esto se ha probado con frecuentes ataques de Hamas sobre el territorio fronterizo. Esta situación, tanto el boqueo israelí como los ataques de Hamas, crea un ciclo de violencia y represalias que afecta a ambas partes y siempre, sobre todo, a la población civil.

Israel tiene el derecho reconocido internacionalmente de defender a sus ciudadanos contra ataques. Las respuestas militares de Israel a los ataques de Hamas son vistas por Estados Unidos entre muchos, como una forma de autodefensa, aunque las tácticas y el alcance de estas respuestas son a menudo objeto de críticas por parte de la comunidad internacional debido al alto número de víctimas civiles palestinas. De acuerdo, no podemos cerrar los ojos ante las matanzas que esta guerra ciega contra grandes núcleos urbanos está causando. Ambos lados han fallado en alcanzar un acuerdo de paz duradero. Las negociaciones de paz han sido interrumpidas repetidamente, y los líderes tanto israelíes como palestinos han sido acusados de no comprometerse lo suficiente para encontrar una solución viable al conflicto, y los que lo han intentado han caído como víctimas de actos terroristas.

No sin odio en sus ojos, con los labios apretados, se dio la vuelta y me dejó antes de llegase yo al punto final, pero, creo que le di algo que pensar. Hoy hemos estado en paz, hasta ahora. La policía ha venido a ver si todo transcurría en paz y sin problemas. Seguimos la campaña, tomamos café. Hablando con la gente escuchamos sus problemas, sus miedos, sus deseos, sus esperanzas. Hablamos con gente mayor, con jóvenes, con niños, que vienen por los caramelos. El sol nos ha acompañado ya casi dos semanas. Yo he tenido tiempo hoy de liderar un grupo en un paseo por la historia, una caminata idílica con gente estupenda con ganas de aprender.